SÓLO EL CANTO DEL GALLO NO PAGA

Leo en el diario, no en un cómic, que la SGAE reclama a un barbero 12 euros mensuales por tener la radio puesta en su establecimiento, producto del cual se benefician sus clientes. Al barbero le ha parecido una tomadura de pelo y les ha dicho "demà m'afeitareu". Pero no, resulta que está en plena vigencia una ley que dicta que en cualquier establecimiento público donde suene música, el dueño la tiene que pagar.

No sé dónde leí que en la antigua sede de la Sgae había una inscripción que pregonaba: "Sólo el canto del gallo no paga derechos de autor". Supongo pues que deberá ser multimilonario el pseudomozart que inventó las notas que llevamos en el móvil.

Ahora escribo desde un bar con wifi. Suena Carla Bruni. ¿Le llegarán a la primera dama algunos céntimos que el dueño del establecimiento paga como impuesto musical revolucionario? ¿Cómo saben los de la Sgae que canta ella y no otra? ¿Cuándo llamamos a algún sitio y nos ponen la musica de espera, la pagamos nosotros, la pagan ellos? ¿Cuando subimos a un taxi, una parte del cuerpo d ela carrera va destinada a satisfacer la cuota musical o verbal del viaje? La guardia urbana multa a los músicos de calle porque tocan mal o molestan o porque no pagan los derechos de autor de las composiciones que cantan? ¿Pagan impuestos los restaurantes por los cuadros que tienen colgados de las paredes? ¿Por qué cuando vamos vestidos con ropa cara o perfumados con perfumes caros, no nos pagan una pequeña cuota por el servicio que ofrecemos a quien nos ve o nos huele?

El caso es rapiñar unos céntimos de cualquier bolsillo. Espero que no me pidan esa cuota por la música que voy colgando en el blog. Y hoy para no ser menos cuelgo el videoclip que Fangoria ha grabado con Sara Montiel. En el video no encontraremos a una gran cantante o una gran actriz, creo que a estas alturas no es necesario un alarde interpretativo por su parte, incluso el hecho de que no se sepa el playback reafirma la idea de que lo interesante es la Sara Montiel como icono pop, y ahí es donde ella da el máximo, con estilismos y actitudes imposibles para una mujer de su edad. (LO reconozco, soy un friki musical)

FELICIDADES, JUAN, CON UN DÍA DE RETRASO.