Hoy he descubierto una nueva manera de querer. Bueno, más concretamente a una tipología de personas muy curiosas, a los que llamaré especuladores emocionales. Estoy hablando de los que quieren "a cobro revertido". Son personas que dan más importancia al retorno d ela emoción que al mismo acto de darla. Por cada sentimiento o emoción entregada esperan una vuelta directamente proporcional al sentimiento inicial que compense tanto esfuerzo. Convierten las emociones en un intercambio de bienes, aunque estos sean algo abstractos.
Son aquellos que sólo te ayudan si sacan una ayuda a cambio, que te abrazan si saben que van a ser abrazados con la misma intensidad. Se dan poco a poco. Creen caminar sobre seguro. Son unos personajes que siempre van a ir por detrás de lo que desean. Y el déficit es y será para aquellos que se les intenten acercar. Lo malo es que estas mismas personas son las que cuando las necesitas, no aparecen. Son las que si no sacan beneficio, no se levantarán de sus asientos. Y tú te sientes como pagando un cariño de segunda categoría.
Y comparto otro descubrimiento: La versión original de la canción "Se me va" de Bambino. Ya la conocía cantada por elefantes.
2 comentarios:
ui, que negatiu te veig, pensa que en contra d'això també trobam les persones que estan sempre, que no diuen mai que no, que gaudeixen d'estar al costat de algú que ho necessita...això val moltísim més que les enrabiades que puguis agafar pels "payasos" (esper no guanyar-me mai aquest apel·latiu)
Ai, peoncita, ¿quién te hizo enfadar? Precisamente tú, que siempre estás dando tu tiempo por los demás, has recibido la visita de estos "especuladores". Como dice cenicienta, piensa en todas las personas que te rodean y no te piden nada a cambio. Bueno, yo te pido algún que otro abrazo, pero en el fonddo te gusta darlos... ja ja ja ja. Fenomenal Bambino, y no el "Payaso" de Falete.
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