viernes, 28 de agosto de 2009

Proust y las mujeres

Normalmente no escribo más de una entrada por día, pero en la anterior entrada Lacuerda me hizo reflexionar sobre una película de Jose Luís Guerín: "En la ciudad de Sylvia". Esta película está vinculada con un cuento de Proust, como le contesté en los comentarios. sólo quería poner un fragmento de ese relato.
(Lacuerda, no te lo tomes a mal, es simplemente una argumentación)

Vislumbraba uno de esos seres que a través de su rostro especial nos anuncia la posibilidad de una felicidad nueva. Cuando es especial, la belleza multiplica las promesas de felicidad. Cada ser es como un ideal aún desconocido que se abre a nosotros. Y ver pasar un rostro deseable que no conocíamos nos abre nuevas vidas que deseamos vivir. Desaparecen a la vuelta de la esquina, pero esperamos volver a verlos, nos quedamos con la idea de que hay más vidas por vivir de las que pensamos, lo que da más valor a nuestra persona. Un nuevo rostro que ha pasado es como el encanto de un nuevo lugar que nos ha revelado un libro. [...] Qué importa si no partimos, sabemos que existe, tenemos una razón más para vivir. Así miraba por la ventana para ver que la realidad y la posibilidad de vida que sentía junto a mí a cada hora contenían innumerables posibilidades diferentes de felicidad.
[...]
Por desgracia no conoceremos todas las felicidades [...]
Al menos nos dan nuevas razones para vivir.
Marcel Proust, Mujeres Desconocidas


1 comentario:

Irene dijo...

Por favor, podrías poner el título completo del relato o el libro en el que se encuentra? gracias