martes, 30 de diciembre de 2008

Colores y feng shui

Hace tiempo me regalaron un libro sobre el Feng Shui. La verdad es que lo tenía olvidado en la estantería. Ni lo había abierto. Aún estaba envuelto en su plástico. Ayer, cuando me senté en el sofá, me acordé de él y decidí echarle un vistazo. Menudo lío. Si tengo que hacer caso a todo lo que dice esta filosofía de vida voy arreglado. Yo que no soy nada detallista, y que lo que busco es la praxis de las cosas, me pierdo con tanta mandinga. Me resultó curioso el capítulo dedicado a los colores. Coincide con lo que estudiamos en el cole (Aquello de colores fríos y colores calientes). Busqué los colores con los que pinté el comedor y la cocina (bueno, parte de ellas).

La base es el blanco, el color del silencio, la paz, la purificación y la ampliación. En el comedor lo combiné con el beige (potencia, alegría, prosperidad y estímulo), y en la cocina con el verde (equilibrio, curación y activación de ciclos vitales). Vaya, que además de gustarme el resultado, según esta teoría, encontraré beneficios mientras coma o esté tumbado en mi sofá. Ahora me falta encontrar los muebles y situarlos, pero no pienso leerme el capítulo de las orientaciones. Es el más largo y el más enmarañado.

lunes, 29 de diciembre de 2008

pintando

LLevo unos días pintando y poniendo luces en casa. Eso y la barra (de la carpa) me hacen tener poco tiempo. Sólo pasaba para felicitar a todos unas buenas fiestas. Por cierto, he engordado un kilo. NOs vemos.

martes, 23 de diciembre de 2008

¿estudias, trabajas o escuchas a Pete Doherty?

Estoy leyendo un estudio sobre neuromúsica, y he de decir que me ha decepcionado. Unos psicólogos de la universidad de Texas, han demostrado que las preferencias musicales de cada individuo definen su personalidad. A simple vista, no es nada nuevo. Lo sorprendente son sus conclusiones (que también eran de esperar).

Según este estudio, los amantes de la ópera somos peligros al volante. Un 45% de los aficionados habían incurrido en alguna infracción de tráfico, el doble que los encuestados que habían escogido los musicales. Yo reconozco mi conducción irreflexiva o mi dificultad para aparcar a la primera. Pero de ahí a decir que soy un peligro por escuchar a Puccini en lugar de los Chicos a todo volumen, pues no lo tolero. Al menos no tengo multas. Algunas de las conclusiones (tan frívolas como la anterior) son:

HEAVY METAL: curiosos, inteligentes, atléticos y dispuestos a asumir riesgos. Suelen ser líderes sociales.
JAZZ/BLUES: inteligentes, creativos, liberales y tolerantes.
CLÁSICA: liberales, perspicaces, con niveles de educación superiores y mayores ingresos que la media, mayoritariamente casados.
RAP/HIP-HOP: extrovertidos, locuaces, enérgicos y con autoestima alta.
POP: felices, generosos, fiables, bastante convencionales, se consideran personas atractivas.
ROCK: activos, aventureros, y más propensos que la media a declararse ateos o agnóstico.

Como veis, no dicen nada nuevo. Es más, mantienen las etiquetas. LO curioso de todo esto es que se tomen la música como algo tan baladí, cuando es un elemento muy presente y manipulador de nuestro estado. En fin, me voy al super. Espero no tener ningún accidente.

lunes, 22 de diciembre de 2008

Hacia el cambio

Este fin de semana ha servido para mover las cosas. Yolanda me regaló un microondas (metalizado) y yo me decidí a comprar una vajilla: 18 platos (6 de cada) con ensaladera a juego; 18 vasos (6 de cada). Los coloqué en una de las estanterías de la cocina y los miré durante unos minutos, pensando en su futuro. Junto con la nevera y la lavadora, son los únicos objetos que tengo en casa. Al rato llegó Jesús, y entre los dos miramos las bombillas de la terraza del ático. El problema es que las bombillas están mal y hay que cambiarlas.

Intentaré aprovechar estas vacaciones, que empiezo el 23, para comprar los topes de las puertas, bombillas para la terraza (Que no son imprescindibles) y los muebles básicos para poder hacer el traslado (Cama, mesa con sillas y sofá). Igual compro una tele y con su armario, pero de momento se puede prescindir. El caso es provocar el movimiento, o no llegaré a mudarme nunca.

He perdut el costum
de menjar-me les teves paraules,
de deixar que es converteixin en carn.
El teu nom ha estat com un mantra,
la melodia que m’ha acompanyati a la que he intentat habitar.

viernes, 19 de diciembre de 2008

días de barra

Poco a poco, como las lumbres de la chimenea, se van acabando los días de estrés y prisas. El miércoles despedimos el programa hasta enero (o lo que fue un intento de programa. Gracias a los que aguantasteis tanta incompetencia técnica). El martes, (después de saber que me ha tocado la lotería de navidad, claro), despediremos a los nenes hasta enero (bueno, los pocos que me quedarán). Y por fin, podré dedicarle un poco de tiempo a lo que será mi casa, mi futura casa. Hace semanas que no voy por allí.

En fin, esta noche toca cena de cole. Es curiosa mi relación con el claustro de s’Olivera. Desayunamos juntos (bueno, un pequeño grupo), comemos juntos, y ahora cenamos juntos. Empiezo a estar un poco saturado de tanto cole, pero no lo cambio por el anterior. (Aquí no hay baldosas amarillas que seguir). Como estoy algo pachucho de la barriga, iré a la cena, pero no saldré de marcha. Necesito descansar.

El domingo tendremos tarde solidaria en la carpa del pueblo. A partir de las 17horas. Tocarán los Corleone (Pepe de casas baratas y amigos). La primera hora de la tarde será infantil, pero luego se animará. Si os apetece, nos vemos en la barra. Eso sí, yo estaré detrás, no delante. Un abrazo.

martes, 16 de diciembre de 2008

programa sobre final

Esta semana el programa está dedicado a los finales. Por eso os preguntamos: ¿Qué hacéis para acabar vuestro día? Por cierto, para el final del programa, preparad 12 uvas, vamos a celebrar el fin de año.

lunes, 15 de diciembre de 2008

La seducción de la sacralidad

Los finales de trimestre siempre son traumáticos y estresantes. Debo aprender a vivirlos con calma, con anticipación. Pero eso es un aprendizaje del que ya me ocuparé en la intimidad. Je je. Este sábado actuamos en el palacio de congresos de Ibiza, para los enfermos del alzheimer. Fue una actuación revuelta y agitada, pero cumplimos con el objetivo final: divertir a la gente. Yo tuve que suplir a un personaje, así que estuve toda la noche entre los mandos técnicos y las tablas del escenario. (Me prometí muchas veces no volver a hacerlo, pero siempre caigo en la misma piedra.)

En el palacio, estaban presentes la Sacralidad y la Iluminación, mis dos abismos superficiales. Mientras actuaba, las tenía presentes, y sonaba en mi mente la canción J' ai jete mon coeur de Françoise Hardy. He de decir, que desde hace unos días, la Iluminación ha perdido toda su fuerza de atracción, y la Sacralidad hace meses que no estaba presente, más que en alguno de mis cuentos (que por cierto, me publica este mes una revista de Barcelona). La Iluminación ha dejado de seducirme, que no es lo mismo que el deseo. La seducción no es deseo, sino lo que juega con el deseo y se burla del deseo. Lo que eclipsa el deseo, le hace surgir y desaparecer, levanta las apariencias delante de él para precipitarle a su propio fin. Como consecuencia, perdió su fuerza y todo mi interés.

Pero al volver a ver la fuerza enigmática de la Sacralidad, se puso en marcha el proceso de seducción y, con él, su fuerza gravitacional o de succión, permaneciendo más allá de su propia historia, de su determinación, de su verdad, de la resolución enigmática. Y lo que habita en el corazón de esa fuerza, no es el deseo, sino el desafío del mismo. Para la seducción, el deseo no existe. Así como tampoco el azar para el jugador. En el mejor de los casos, es la que permite jugar: una baza. El deseo es lo que debe ser seducido, como el resto, como Dios, como la ley, como la verdad, como el inconsciente, como lo real. Tales cosas sólo existen en el breve instante en que se las desafía a existir, sólo existen por el desafío que les formula precisamente la seducción, que abre ante ellas una sima sublime, a la que acudirán sin cesar a precipitarse, en un último resplandor de realidad. Pensándolo bien, nosotros mismos sólo existimos en el breve instante en que somos seducidos, sea lo que sea lo que nos arrastre: un objeto, una cara, una idea, una palabra, una pasión.

No me enrollo más y me voy a seguir con los informes de evaluación. ¡Odio tener que evaluar!

martes, 9 de diciembre de 2008

programa azul

Para el programa de esta semana os preguntamos: ¿Qué personaje, objeto, canción u objeto de color AZUL, os ha marcado? Sí, el programa va sobre el color azul.

http://es.youtube.com/watch?v=Ah83z5nLo_Q Barrio sésamo

http://es.youtube.com/watch?v=yoEw-9BKXhI Príncipe azul

http://es.youtube.com/watch?v=-L6VjAzsXMg&feature=related Muchachito bombo infierno

El pasado

Sé que no debemos olvidar el pasado, nuestro pasado, pero a veces éste actúa como un iceberg que nos puede hundir si no estamos alerta. Uno es hijo de su propia historia, pertenecemos a nuestra matriz cultural, pero eso no significa que debamos estar siempre enganchados a ella. En ocasiones, dejamos que el pasado actúe como una biografía de máscaras abandonadas, de aquello que fuimos y nos llevó al ser. Seguimos con la careta puesta, sin superar esos islotes de hielo (llámese amores pasados u otras cosas perdidas pero presentes en la mente), cuando lo que nos convendría sería despendernos de esos peligros, o en el menor de los casos, de tenerlos presentes en la carta de navegación para no naufragar.

Para sentirnos libres, lo que importa es el aquí y el ahora. La liberación debe llegarnos en el presente, no en el final de los tiempos, como una especie de salvación mesiánica. ¿Os dais cuenta de la influencia religiosa que contiene el pasado? La culpabilidad, las obsesiones por aquello que hicimos, los remordimientos... todo apunta a un sufrimiento importado del castigo eterno. Seríamos más libres, si aplicando la idea Zen, sólo tuviésemos en cuenta las responsabilidades y no la culpabilidad. En el momento en que le otorgamos culpabilidad al tiempo, éste cae pesado sobre los hombros. Pero creo que esto es asunto de otra entrada, no de lo que quería decir hoy.

Con esta entrada pretendo plantear la perspectiva del tiempo como un eterno presente, contrapuesto al tiempo degenerativo que procede de la abdicación del presente. Dicho de otro modo: La percepción del tiempo presente. Según la física quántica el tiempo no transcurre y el presente no se mueve. El presente se define por si mismo, no necesita de referencias externas para afirmarse. En la carta de pésame que Einstein escribió a la hermana de su amigo Besso, le decía “para nosotros, físicos convencidos, la distinción entre pasado, presente y futuro es sólo una ilusión”.

Podría poner mil ejemplos sobre la inexistencia del tiempo y de sus fusiones (pasado, presente, futuro) sobre nosotros, como, por ejemplo, las conclusiones de la ontología de Parménides: El ser no ha comenzado nunca a ser ni puede nunca dejar de ser, o bien, el ser está fuera del tiempo y no tiene duración. Es concebido en un eterno presente. Podría nombrar los argumentos de Zenón contra el movimiento, y seguir hasta la extenuación. Pero no lo haré, porque perdería el hilo. Lo que quiero decir hoy es:
Las lamentaciones por lo que pudo ser y no fue, por la equivocaciones, por las pérdidas... toda esa marrullería sadomaso debe desaparecer de nuestro camino. Y no estoy diciendo olvidar. Lo que quiero decir es que a veces es necesario aflojar las correas y vivir más el presente, que al fin y al cabo, es lo único real.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Plantado

LLevos días sin sentarme a escribir en el bloc desde un punto de vista más interno. Todo ha sido rápido y frívolo. Creo que es hora de sentarme, plantarme y autoinspeccionarme. Puedo decir que estoy contento, pero no efusivo. Aquel derroche de energía y emoción, que tanto me caracteriza, ha entrado en una recesión (para hablar politicamente correcto). Parece q2ue me empeño en guardar mis emociones con tanto empeño, que a veces olvido dónde las guardé. Si, además, permaneciera quieto, las arañas podrían tejer telas sobre mi boca. Pero a pesar del silencio, siento como me voy abriendo, lentamente, como una orquídea, como unas manos. Me siento como una bandada de gansos que vuela en silencio hacia el fondo blanco de la niebla.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Noticias absurdas

Un empleat de la cadena Wal-Mart mor aixafat per una allau humana a Nova York
http://www.absurddiari.com/c/llegir.php?llegir=llegir&ref=15580

Los retratos genéticos digitalizados, el regalo de moda en Nueva York
http://www.absurddiari.com/s/llegir.php?llegir=llegir&ref=15577

Se fueron sin pagar y los cazaron a través de Facebook
http://www.absurddiari.com/s/llegir.php?llegir=llegir&ref=15572

Un municipio británico dará chancletas a las mujeres borrachas que no puedan volver a casa con tacones http://www.absurddiari.com/s/llegir.php?llegir=llegir&ref=15563


Cae un árbol navideño y mata a cuatro hombres Sao Paulo.- Cuatro hombres murieron al caer sobre ellos un enorme árbol de Navidad que estaban colocando en una ciudad del noreste.La policía investigaba el motivo de la caída del árbol de aluminio, de 120 metros de altura.El árbol en la ciudad de Aracajú debía ser encendido el viernes.

Ofrecen dinero para bebés con el nombre de Mussolini http://www.absurddiari.com/s/llegir.php?llegir=llegir&ref=15555