domingo, 13 de diciembre de 2009

fragmento de monologo bodas y amigas

Mi amiga J se ha casado. Los hechos ocurrieron el fin de semana pasado. Y todas nosotras, antiguas compañeras de trajín nocturno, sus secuaces en los “ires y venires” de la farra, fuimos cómplices de su firma y aceptación, con despliegue de sonrisa, todo hay que decirlo, del contrato de exclusividad. Y estaba guapa, la tía. La que no se iba a casar nunca. ¡Ja! Llevaba un vestidín que eso no se piensa de un día para otro, no. Ese vestido era muy pensado. Probablemente era el diseño de un vestido que comenzó a fraguarse al mismo tiempo que sus granos adolescentes. A mí me va a engañar ésta!

Flores. Abalorios. Damas de honor. Ceremonia lacrimógena y más de una como yo, pensando: Otra que ha caído. Pero ha caído ¿dónde? ¿en las terribles llamas del matrimonio? ¿en la maloliente trampa de la rutina? ¿En la inevitable cloaca de la fidelidad? ¿o más bien ha caído en la cuenta de que se le estaba pasando el arroz? Ha caído en la cuenta de que le sobran los dedos de una mano para contar los años en los que es viable reproducirse y que sus retoños lleven el apellido del padre. Tal vez ha caído en la cuenta de que o se lanza ahora o está destinada a hormonarse como un pollo de supermercado para dar a luz una linda parejita de gemelos.

En definitiva, que mi amiga J, la que no se iba a casar nunca, se ha casado. Y nosotras, nos hemos quedado un poco desconcertadas. Porque claro, cuando somos más las solteras que las casadas nos sentimos del lado de la cordura. Pero cuando la cosa empieza a darse la vuelta, cuando todas tus amigas se lanzan al bodorrio y tú te lanzas al facebook a hacer amigos… ay.

Mi madre dice que es una chorrada de veinteañera. Vamos, que ya nos vale seguir a los treinta con esa conciencia absurda de la pandilla. Luego va y mi madre se pide una ración doble de tarta de chocolate y se la zampa sin asomo de culpa. “Total, ya estoy casada” dice, que claro, tiene setenta años de edad y cuarenta y dos de matrimonio.

3 comentarios:

Wonder dijo...

és només un fragment, i suposant que t'has reservat el millor, ostris, ara ja dubto de quin m'agrada més, si aquest o el del xiclet... uf, crec que aquest, si, aquest
estàs molt inspirat, segueix així
petonets

Lacuerda dijo...

Te afectó la boda de tu amiga!

Dorothy dijo...

El següent pas és dedicar-li un monòleg a la relació entre mares i filles que han fet els 30 i que no es casen...